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domingo, 26 de abril de 2015

Plasma tu destino

Nuestro destino no está escrito, eso está claro; puesto que nuestros sueños y metas cambian de momento a momento, sin darnos cuenta. 

Si nos basamos en los cambios, en aquellos cambios que surgen de la nada, el destino parece una simple semilla que podríamos destrozar con un colmillo, detenernos en el acto, y meditar sobre lo que queremos; incluso, preguntarnos si realmente la vida es una total basura o el paraíso en sí mismo. Esto nos lleva a tomar decisiones, y desde que somos niños hasta la edad de la vejez tomamos las mismas con determinación (o no)...


El destino siempre parece algo complejo, y lo es. Pero de uno depende crearlo y hacerlo de la mejor forma; poseemos 365 días para realizar los cambios que queramos, y una vida para tergiversarlos, esa es la ventaja. Sin duda, aunque parezca extraño, a finales de un año, pareciera como si todo lo que hicimos anteriormente no tuviera trascendencia en nuestra vida, y que por lo tanto no la tendrá en el próximo año y así sucesivamente; aún así, lo seguimos intentando, tratando de innovar nuestra pequeña gran vida. 

Con el paso de los años; décadas; siglos, nuestros actos y acciones obtendrán la mayor relevancia posible si proyectamos el potencial necesario para que las recompensas sean sorprendentes. Si bien es cierto que será difícil, hay que intentarlo. 

Hagamos hincapié de que las personas más exitosas empezaron siendo fracasadas; y gracias a su esfuerzo y dedicación, no sólo lograron lo imposible, sino que modificaron a su gusto el destino que todos suponen que ya estaba "escrito". El problema con la mente humana es que en ocasiones se conforma con lo que está cerca, y apesar de haber alcanzado o probado su destino, se rinde...no lo cree viable, ni mucho menos como un axioma. 

Podemos llegar a la conclusión de que, podemos tergiversar el destino, tanto como podamos, y de acuerdo a lo grande que queremos llegar a ser. Si no se hace...es como ver un libro (el cual está escrito por alguien más), y creer que con verlo, ya lo hemos leído por completo; de ninguna forma tendría relevancia comprarlo, ¿no crees? 

"A veces nuestro destino semeja un árbol frutal en invierno. ¿Quién pensaría que esas ramas reverdecerán y florecerán? Mas esperamos que así sea, y sabemos que así será." - Johann Wolfgang Goethe.

domingo, 14 de diciembre de 2014

Quiero saber el final

Hay lugares que no conozco
He viajado sin mapa
pero voy hacia un objetivo
no voy a vacilar. 

Me encuentro en un lugar
demasiado reconfortante...
pero, ¿Cómo he llegado? 
Aún no lo sé.

Quiero seguir, pues
Aún no sé el final
de mi verdadera historia
¿Me estoy acercando? 

Quiero saber el final, 
¿Por qué me pasa éso por la cabeza?
En algún momento, lo intenté
o sólo fue una nube gris.

Los pensamientos son algo grave,
fue una estupidez pensar en ello...
El suicidio es una cosa irrelevante,
Hay mucho que vivir, basta ya. 

Por fin he cambiado
mi pensar es totalmente diferente,
ya no hay más quejas
sólo ánimos de saber, de aprender...

Jamás estoy cansado, sólo harto
Éso debe cambiar, para bien,
aunque las cosas desaparezcas
la vida se desvanece, lo sabemos.

Y mi propósito es indiscutible,
hay cosas que se deben hacer,
sueños, anhelos, metas...
no me rendiré, nunca.

Estoy en mi juventud,
soy un adolescente,
pero, pienso más allá
algo fuera del entendimiento de otros.

Pues, quiero saber el final,
aquel en el que mis arrugas
representen conocimiento,
donde las batallas son interminables.

El hecho de haber fallado,
no hay razón por romper todo el libro,
sino destrozar ésa parte de la página,
y continuar escribiendo con tinta invisible.

Pues, todo parece ser una sorpresa,
sólo nosotros tenemos el poder,
el poder leerla, de saborear la prosa
creada, e inmensamente genuina.

¿Me asusta? No, para nada,
¿Debería hacerlo? No del todo,
me dirijo hacia un camino engañoso
pero, siempre al mismo objetivo.

Sólo me he desviado,
por una mala racha,
pero siempre motivado,
no he vacilado.

No cambio mis metas, 
he decidido seguir, 
pues quiero saber el final
aquel exitoso final que me espera. 



Inspirado por la película "My Sassy Girl"

Escrito por: Valencia Ambriz Victor José Luis




domingo, 3 de agosto de 2014

¿Has visto las conexiones?


Vulgarmente algunos tendrán la esperanza de creer que cada uno de nosotros estamos conectados; las casualidades -como solemos llamarlas-, quizás vayan y no terminen en escuetas coincidencias. A éso se le conoce como "destino", pero ¿Será real? No estoy completamente seguro mas podría decir que los seres humanos sí, estamos conectados por un hilo invisible, llegaremos a conocer a personas que de acuerdo a tu "libro de vida personal" correrán la fortuna de cruzarse en tu camino, y no importará si sólo sea por unos segundos; algunos de ellos probablemente permanecerán en tu camino hasta el final, en cambio, otros se perderán en el trayecto (para "bien" o "mal"). 



El hecho es que nos estamos perdiendo el placer de conocer a tantas personas, ya sea por el ocio o por no querer toparse con ellos. Por ello, las conexiones que deben realizarse se detienen y tomarán otro curso. Esto quiere decir que efectivamente nuestro destino está escrito en el momento en que nacimos; lo que no nos habían dicho es que fue plasmado con "LÁPIZ" y por lo tanto se pueden hacer tantas modificaciones como nos plazca y sea posible, con ello estaremos creando nuestro destino en lugar de dejarlo sin echar un par de manos a la obra y llevar a cabo el que se ajuste a las propias expectativas y lo que pretenda lograr cada persona en lo personal para con el mundo. 



Estaría bien el hacerse preguntas a uno mismo como: ¿Por qué conocí a esta persona? ¿Debo conocerlos o no? ¿Habré tomado las decisiones correcta o incorrectas en este mundo? 

     Lo cierto es que cuando buscamos relacionarnos con personas desconocidas suele ser una tarea difícil; el estar conectando físicamente o virtualmente con seres humanos que no habíamos visto jamás es genial, pues conforme pasan los años te das cuenta que de alguna u otra forma has aprendido de él o ella. 
Hemos perdido un poco de comunicación verbal o física, y no, no es culpa de la tecnología, sino debido a nosotros mismos por no querer conectar de manera directa, suena un poco triste a la vez irónico que tengamos las herramientas y no hagamos uso de ellas para cumplir el destino que sobrescribimos. 


Todo el mundo está conectado pero no están conectando.
El elemento humano siempre ha estado desapareciendo.
Dime, ¿Lo has visto?
¿Lo has visto?
-Armin van Buuren feat. Lauren Evans - Alone
 

miércoles, 29 de enero de 2014

Vale la pena vivir

Me he dado cuenta que no todas las personas son iguales, solemos ver lo malo que han hecho en sus vidas, pero casi siempre ignoramos lo bueno; un círculo vicioso. 

Conocemos demasiadas personas en nuestra vida (sea corta o larga), unas logran impregnar en nuestra mente recuerdos que quizás no vamos a dejar ir. Nos hacen reír, llorar, son capaces de causarnos dolor pero también lo remedían. Existen seres humanos que se cruzan en nuestro camino por una razón de ser; probablemente creo en el destino, espero no ser el único, pienso que cada una de ellas entra en nuestra vida para darnos un par de lecciones, tal vez algunas de ellas no están físicamente pero dejan en que pensar. 
    Reitero, es irracional tener un propio estereotipo de que todos los seres humanos "somos iguales", ya que venimos siendo hechos de diferente manera y hemos pasado por diversas circunstancias que nos hacen quienes somos, otros deciden tomar caminos equivocados, pero no por uno significa que tenemos una analogía; se tiene que romper esa cadena. 

    La esencia de cada prójimo nos hace individuos de bien, de cada uno depende el camino que toma; piensa con delicadeza, la vida no tiene manuales  tú creas tus propios horizontes.
      Usualmente todo parece complicado al conocer nuevas personas, pero al final siempre es bueno darte nuevas aventuras, tener un pensamiento de positivismo, quizás haga las cosas más sencillas o no, pero vale la pena intentarlo...